El 2017 ha sido un año único para el universo \’gastro\’, en el que hemos disfrutado de sorpresas culinarias y podríamos decir que (casi) todo ha salido a pedir de boca. Pero, con el nuevo año, creemos que ya ha llegado el momento de darle la bienvenida a las nuevas tendencias gastronómicas que vamos a poder disfrutar tanto en restaurantes como en los catering de eventos en 2018. La conclusión que sacamos es que vamos a empezar a comer mucho mejor. Año nuevo, menú nuevo.
El verde sigue siendo el rey
De acuerdo con la tendencia mundial, las estadísticas muestran que, más temprano que tarde, los vegetales representarán la mayor parte de la oferta alimentaria. Y hasta las carnes serán elaboradas con proteínas vegetales.
Este año también imperará un hábito que hasta ahora era exclusivo de algunos, el ‘trashcooking’, que llevará a muchos a no desperdiciar ni siquiera la piel de frutas y verduras, y a convertirlos en materia de consumo debido a su gran valor nutricional. Así que no se extrañe si ve en la carta de un exclusivo restaurante unas cáscaras de sandía en escabeche.
Los batidos de frutas y de vegetales seguirán vigentes, y se incorporarán en sopas, barras nutritivas y productos horneados, nuevos polvos mágicos o especias que, a juicio de los nutricionistas, llegarán para quedarse. Es el caso de la matcha, el cacao, la cúrcuma molida, el ajonjolí negro y el amaranto.
Y llegará un nuevo tipo de comensal, el ‘flexitariano’, ni carnívoro ni vegetariano, que opta por una alimentación en su mayoría vegetariana, pero que no renuncia del todo a los placeres de la carne, el consumo de pescado o productos animales.
Llega el Medio Oriente a los catering de eventos
Durante los últimos años hemos conocido y experimentado con las cocinas asiáticas y peruanas, pero ya toca seguir viajando por el globo a través del paladar y nuestro próximo destino es África del Norte y Oriente Medio. Más allá del hummus o el falafel, que ya los tenemos muy vistos, vamos a indagar más en estas culturas gastronómicas que tienen mucho que ofrecer. Apunta este nombre: shakshuka, significa \’todo mezclado\’ en árabe y es un plato que se prepara con tomates guisados, especias y huevos escalfados
Saber lo que va a comer
La transparencia en el etiquetado, poder saber de qué está compuesto exactamente el alimento que compramos, o de qué región procede, no es algo nuevo, pero ahora el consumidor quiere además conocer con detalle cómo se produce. El 29 % de los nuevos lanzamientos de productos agroalimentarios ya utilizan el origen como gancho para dar prestigio a su producto, especialmente con la bandera de la proximidad, pero también del exotismo. El producto local fresco está de moda pero debe tener valores añadidos como la sostenibilidad o la producción ética.
Trashcooking: Hasta la cáscara
No te asustes con el nombre de esta tendencia, todavía no nos hemos vuelto tan locos como para ponernos a comer basura. Esta tendencia ya la vaticinamos el año pasado y va a seguir creciendo, en sintonía con el aumento de la conciencia ecológica. El trashcooking consiste en aprovechar todo en la cocina. La idea es reducir los desperdicios y contribuir a la salud del planeta. Nada se tira. Todo es comestible, sólo hay que saber cocinarlo. A partir de ahora vamos a empezar a practicar esta tendencia en casa.
La piel es la parte de las frutas o las verduras que antes se desechaba y que ahora se consume, esto se debe a que se busca reducir el desperdicio de comida y, por otra parte, al aporte vitamínico que contiene.
La cáscara tiene los nutrientes, y las personas ahora lo saben, al punto que en los supermercados de algunos países ya están a la venta las cáscaras de sandía encurtidas. Lo beneficioso y económico de esta práctica es que también se puede adoptar en los hogares. Tenga en cuenta que debe lavar muy bien las frutas si las consume con piel.
Y este año prepárese para comer flores, pues en todo tipo de platos, desde ’lattes’ a granola o malvaviscos, podrá encontrar lavanda, pétalos de rosa, hibisco y flor de saúco.
Polvos mágicos y nutritivos
Este nuevo año llegó con nuevos propósitos, uno de estos es tener una alimentación más saludable, al punto de que hasta especies en polvo se han convertido en ‘superpolvos’.
Estas especias y polvos nutritivos lentamente se han ido instalando en nuestras cocinas vinculados a la elaboración de alimentos.
Puede que los nombres que más suenen sean matcha, jengibre o cúrcuma. Pero este año veremos nuevas tendencias como el ajonjolí negro, sin olvidar a la maca y el amaranto, que seguirán presentes.
Cuarta comida
Incorporar un ‘snack’ saludable a las comidas diarias, justo antes o después de hacer ejercicio o a media mañana, será un hábito cada vez más frecuente este año.
Cada vez se hablará más de la cuarta comida, refiriéndose a ese alimento vital para quienes no tienen tiempo de sentarse a tomar el desayuno o a almorzar de forma pausada. Ya se pueden encontrar muchas ofertas en la industria de snacks que reúnen la característica de saludable, hasta en alimentos antes considerados como ‘pecados capitales’, por ejemplo, las palomitas y las papas gourmet.
Productos ‘plant-based’
Gracias a la tecnología, en la mesa hay cada vez más productos exquisitos donde los protagonistas son ingredientes de origen no animal. Y para lograr una alimentación sana y respetuosa con el medio ambiente, hay alimentos como carne elaborada a base de proteínas vegetales:
Salchichas, hamburguesas y filetes. Incluso se consiguen quesos, yogures y leches elaborados con semillas, frutos o raíces de plantas; atún vegano preparado con verduras y legumbres y hasta dulces sin lácteos como el glaseado vegano, brownies, helados, brioche y crème brûlée.
Siéntete libre de organizar una barbacoa plant based como esta que organizamos el año pasado!!
Galletas de grillo
Para los más osados, los insectos estarán en su radar, especialmente como fuente de proteínas completas y ecofriendly. Grillos, escarabajos o cualquier invertebrado artrópodo, harán parte de la dieta de los más visionarios. A largo plazo comer insectos será una realidad global, porque resultan seguros y sostenibles por su rápida reproducción y su bajo costo y pueden ofrecer entre 15 y 70 o más gramos de proteínas por cada 100 gramos de animal. En algunas culturas los bichos son imprescindibles en platos tradicionales. Incluso, para algunos una galleta de grillo es un manjar.
Los supercafés
No solo estamos viviendo un momento de auge para el café con la apertura de locales especializados en este arte, sino que vamos a fusionar esta tendencia con los superalimentos. Lo último en el universo cafetero es añadir superalimentos para conseguir cafés más nutritivos, energéticos y beneficiosos para la salud. Prueba con cúrcuma, espirulina, semillas de chía…
Dale un twist al postre
Y terminamos con los postres. Siguiendo esta healthymania los dulces van a vivir una evolución muy significativa. Nos despedimos del azúcar refinado y los aditivos en los postres y lo haremos de dos formas. Primero, apostando por platos elaborados con fruta. Pero también, para contentar a los más golosos, transformando las recetas de los postres de toda la vida sustituyendo los azúcares refinados, la mantequilla o los lácteos animales en el caso de los espíritus veganos.